Hoy te voy a hablar sobre enfermedades de los peces, concretamente hablaré sobre el punto blanco o Ich, que es, como aparece en el acuario, su ciclo vital, es muy importante conocer todos estos aspecto para poder aplicar un buen tratamiento y así saber como curar el punto blanco a tu pez.
¡Sin más dilación… Dentro post!
Qué es el punto blanco a tu pez
Muy buenas a todos, soy Erik de Acuarioland y hoy voy a hablaros de la ya conocida y archienemiga enfermedad que es el punto blanco y todo lo que necesitáis saber sobre ella.
Como siempre en esta afición, este vídeo es una recopilación de datos y de medidas que parten de mi experiencia y que me han ido bien, y que me parece super importante tenerlo en el canal.
Para empezar, que es la enfermedad del punto blanco o Ich? Pues el Ich o punto blanco es una enfermedad provocada por un protozoo ciliado.
De nombre científico Ichthyophthirius multifiliis, es una de las enfermedades más comunes en los acuarios.
Se trata de un parásito de los peces de agua dulce que se localiza debajo de la mucosa de los peces o en las branquias de estos donde se alimenta. Son de aproximadamente 1 milímetro, pareciendo que el pez tiene granitos blancas.
Normalmente, como la mayoría de las enfermedades, aparece cuando los peces tienen una bajada de defensas, bien sea por una mala alimentación como por periodos en los que han sufrido estrés. De ahí la importancia de prevenir estos dos factores y así evitar la enfermedad.
Otro motivo muy común de aparición de punto blanco suele ser por la introducción de peces contagiados en el acuario, por lo que bajo mi punto de vista es muy positivo disponer de un acuario de cuarentena para prevenir el contagio al resto del acuario.
Esto puede resultar muy purista, pero es muy útil tener los nuevos peces durante un tiempo en un acuario de cuarententa par asegurarnos de que no sean portadores de Ich ¿ Porqué digo esto ? Porque esta enfermedad como muchas otras pueden pasar estados de latencia en los que no se presentan síntomas y parece que cuando vamos a comprar el pez está sano, pero es portador del protozoo y contagiará a los habitantes de tu acuario.
Otra forma de intentar evitar contagiar a tus peces es en el momento de la compra, quedarse un rato observando el pez que queremos durante un rato y ver que comportamiento está teniendo, si vemos que se rasca por las rocas o se arrastra por el suelo es que tiene cualquier tipo de molestia y podría tener punto blanco.
También es importante si es posible observar las branquias de los peces, ya que suele alojarse allí y provoca síntomas de dificultad de respiración.
Otras afecciones que se ven en los peces enfermos de Ich son aletas pegadas al cuerpo cuando están tranquilos y que se frotan contra los elementos decorativos como ocurre con la grava o sustratos las raíces, las plantas, etc
Ahora que ya entendemos que es el punto blanco, como son los síntomas y como puede aparecer en el acuario, os voy a hablar del ciclo vital del Ich y del porqué es tan importante conocerlo a la hora de aplicar un tratamiento.
Proceso vital del punto blanco
El Ich al ser un parásito necesita de un huésped para completar su ciclo vital. Y es por este ciclo vital de que sea tan contagioso para nuestros peces.
El ciclo vital es muy sencillo, comienza cuando el parásito una vez maduro se desprende del cuerpo del animal infectado, en este caso nuestros peces, que se puede ver en el pez como si se le cayese la verruguita blanca.
Cuando todo esto ocurre el parasito se deja flotar libremente por el acuario, movido principalmente por la corriente y va buscando zonas con poca corriente para asentarse cómodamente.
Cuando esto pasa, ya sea en el substrato, rocas, vidrio, etc el parásito maduro forma un quiste. Y os preguntaréis, ¿que es un quiste?
Pues es una estructura que se suele formar en bacterias y protozoarios que ayuda a la resistencia ante condiciones ambientales difíciles, lo que ayuda a la supervivencia de estos.
Además, tengo que decir que es la manera de reproducirse en este caso, lo que provoca un aumento exponencial prácticamente de la población parásita en el acuario.
Entonces una vez se forma el quiste, el adulto comienza a dividirse generando cientos de formas juveniles.
Esta división tan grande provoca que el quiste reviente y que las formas juveniles resultantes de la división queden libres en el acuario.
Lo que hacen estas formas libres es buscar un nuevo huésped en el que se instalarán, alimentarán y madurarán. Lo que da lugar a un adulto y al cierre de este ciclo.
Ahora viene lo realmente importante y es que este ciclo depende de dos factores, el principal es la temperatura del agua y el otro es el pH.
Estos dos factores afectan a la velocidad del ciclo y por tanto a la velocidad y el número de contagios, de tal manera que a temperaturas más altas se acelera el desprendimiento de la piel del parásito ya que esto provoca el aumento del metabolismo de este, y a rangos de pH más bajos, es decir a pH más ácidos, la capacidad de supervivencia del parásito es mucho menor.
Un dato curioso que encontré es que si la forma juvenil, no consigue encontrar un huésped en un máximo de 48 horas, este muere.
De hecho, en muchos estudios que he estado leyendo, una de las maneras para reducir drásticamente el Ich en los peces enfermos era que los cambiaban de acuarios cada 40-48 horas, haciendo que la posibilidad de contagio bajase notablemente, claro que esto en nuestra casa es bastante difícil.
Como tratar el punto blanco
Aquí es cuando viene lo complicado, como poder acabar con semejante bicho.
La verdad es que las medidas más inmediatas que yo haría serían primeramente aumentar la temperatura del acuario hasta un máximo de unos 31 ºC.
Yo siempre lo he dejado en 30 ºC y me ha funcionado perfectamente.
Hay que tener en cuenta que el aumento tan brusco de la temperatura en el acuario nos puede provocar un shock en los animales que tenemos y tener bajas por lo que es aconsejable realizar la subida gradualmente.
Es decir, la manera de proceder con la temperatura es del orden de un grado más en el agua del acuario por día, hasta alcanzar la temperatura máxima y teniendo en cuenta las especies que tenemos y los rangos máximos que pueden.
Una vez llegamos al máximo la mantendremos ahí hasta que termine el tratamiento. Cuando ya hemos terminado lo que tenemos que hacer es bajar la temperatura del agua hasta la temperatura que nosotros teníamos inicialmente.
A la hora de bajar la temperatura lo haremos gradualmente a razón de un grado menos por día.
Así conseguiremos dos cosas, que los animales no entren en shock y que no se produzca un rebrote en el acuario.
El hecho de subir la temperatura es para acelerar el ciclo vital del parásito y que este se desprenda más rápidamente del cuerpo del huésped, siendo así posible su eliminación, ya que es en este caso cuando la medicación/productos químicos son más eficaces.
Ya que cuando el parásito se encuentra en la piel del huésped está protegido por la mucosa de este.
Es muy importante iniciar el tratamiento lo antes posible, ya que en el hábitat limitado y con una población densa de un acuario puede producirse una propagación casi explosiva de las formas libres de este parásito.
También podríamos bajar el pH hasta un mínimo máximo de 5.5 ºpH.
Pero la verdad es que yo descartaría esta opción por la complicidad que tiene y por el peligro que puede suponer para los habitantes del acuario descender de forma considarable el PH del acuario.
En caso de que estas opciones no funcionen, en el mercado hay muchos tratamientos generales y sobre todo específicos para esta enfermedad.
A mí no me gusta la idea de utilizarlos indiscriminadamente, pero siempre es importante que valoréis el estado de vuestros animales y que sigáis a rajatabla las especificaciones de los fabricantes.
Espero que os haya gustado el post y que dejes en los comentarios las experiencias que hayáis tenido con tus peces y esta enfermedad. ¡Os estaré leyendo!